Anónimo (2017) Argentina
Médico obstruye aborto legal en Argentina, arruina la vida de una joven.
En 2017, una mujer de 19 años en Argentina solicitó un aborto debido a una violación y fue ingresada en el hospital con contracciones. El médico le dio una serie de medicamentos sin su consentimiento, lo que detuvo las contracciones. La admitió en la unidad de salud mental donde permaneció durante dos meses y medio. Luego tuvo una cesárea y el bebé fue dado en adopción.
El 21 de mayo de 2019, el ginecólogo de la mujer, Leandro Rodríguez Lastra, fue declarado culpable de obstruir un aborto legal. El juez Menet dijo que Lastra nunca tuvo la más mínima intención de proporcionar un aborto legal a la niña cuando condicionó el proceso a que primero debía someterse a una evaluación psiquiátrica, algo que la ley no exige. Lo hizo “a sabiendas“, a pesar de que otros profesionales de la salud en el Hospital Oro le informaron que no se podía realizar ninguna evaluación a tiempo para proporcionar un aborto debido a la falta de especialistas en el hospital para hacerlo. Por el contrario, el médico trató de usar su posición para violar los derechos de la joven. El juez dijo además que cuando sucedieron los hechos en 2017, el médico no estaba incluido en el registro de objetores de conciencia de la provincia, había mantenido en todo momento una negación de la práctica que se le exigía, a la que estaba obligado por ley, una negación que trató de ocultar con excusas de varios tipos y sobre la cual no informó a la joven en cuestión, ya que era su obligación de respetar los derechos de la paciente.
Las pruebas de la joven fueron presentadas por la psicóloga Paula Salto. Ella informó en nombre de la joven: «El médico hizo todo lo que pudo para que ella tuviera que continuar con el embarazo, que experimentara flashbacks diarios e imágenes de la violación y que luego sufriera mucho porque había sido hospitalizada hasta que su embarazo llegó a término. «Esto arruinó mi vida», dijo.
El abogado defensor del médico le pidió al juez que tuviera en cuenta la situación del niño de dos años que había nacido. El juez Menet respondió: “No es un argumento apropiado en este caso, ni es legal. Sin embargo, tengo la intención de responderlo «. Él dijo:» Es evidente que ante la colisión de intereses, la vida del niño frente a la libertad sexual y la autodeterminación de la joven, en el caso de una concepción producida por una violación, la ley debe hacer que el segundo prevalezca sobre el primero «. Y:» Esta experiencia traumática solo puede ser sufrida por una mujer «. El juez también describió lo que le sucedió como» doble violación «y» violencia obstétrica «.
Fuente: Campaña internacional por el derecho de las mujeres al aborto seguro, 24 de mayo de 2019